miércoles, 13 de agosto de 2008

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Aca no se llama, ni a Neruda (que casi no lo he leido), ni Gabriel García Marquez, ni a las tildes que de verdad me odiaron bastante...

...Se llama un poco de lo diario (bueno talvez mas de mi diario), desde lo que me contraria en el momento, de lo que me genera necesidad de sacar de mí, hasta las posibles dudas existenciales. quizas la terapia funciona cuando me coloco a escribir en mi portatil, pero gracias al muy famoso ambiente seguridad que se respira en Bogota y los mentirosos 3 Kg de peso de mi maletin sumados a las astronomicas distancias de mi diario...pues bueno entenderan que debo hacerlo cuando pueda y cuando llegue a un pc...

Bueno por ahora entre consultas, vainas ingenieriles, el pensamiento de alguien que importa muchísimo y los cuentos del diario, prosigo hasta que vuelva inspirarme

1 comentario:

Carolina dijo...

A las odiosas tíldes: el mundo ha cobrado venganza y se olvido de ellas y de su compañera, la ortografía. Importa lo que se vive, lo que se es, lo que se hace, lo que se ama, lo que se dice, lo que se escribe.

Eso sí, por ser este momento de la historias de proezas y de hazañas imposibles, me declaro defensora de la ortografía y de las tíldes.

Pero, al fin y al cabo, lo que importa es lo que se dice, lo que se vive y se lleva en el corazón.

Je t'aime beaucoup.